HOGAR. Evita los Efectos indeseados del DESORDEN

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Evita los efectos indeseados del desorden

ThinkStock - Ryan McVay

Si bien el desorden en cierta medida está asociado con la creatividad, en ocasiones llega a niveles desesperantes que se van potenciando en la medida que las familias se agrandan y los espacios se achican. Olfateando casos extremos en los que la desorganización hogareña ha llegado a alterar el día a día de quienes la sufren, los diseñadores Nina Ferrer y Michael Moeller recorren Nueva York para ayudar a solucionarlo. El resultado puede verse en Cada cosa en su lugar: Nueva York.

En ella, los efectos nocivos del desorden saltan a la vista. Repasa los más comunes junto a nosotros y, si te identificas con algunos de ellos, será mejor que en familia se pongan a trabajar para contrarrestarlos. 

1. Te aleja de tus seres queridos: Suena un tanto extremo, pero es lo que les sucede a Millie y Josh, una adorable pareja de Brooklyn y protagonista del primer capítulo de la serie que, a pesar de ser sumamente sociable, ha dejado de invitar a sus amigos y familiares a su hogar debido a la vergüenza que le causa el desorden reinante. 

Evita los efectos indeseados del desorden en el hogar 2

Crédito: ©Kara/Creative Commons

2. Te hace echarle la culpa al otro: Es otro de los efectos que sufren Millie y Josh, quienes, cuando el desorden los sorprende, no hacen más que encontrar las razones de esto en el otro: Josh culpa a su esposa de haber pedido demasiados regalos de bodas que ahora no tienen ningún uso y ambos culpan a la familia de Josh por haberles enviado un camión entero lleno de muebles que habían pertenecido a su abuela. Finalmente, la última excusa recae en George, su hijo de cinco años, acusado de tener demasiados juguetes y no querer separarse de ellos. Todas estas explicaciones no hacen más que desviar de su atención del verdadero problema: ellos mismos.

3. Te impide usar la casa como la necesitas: En el capítulo ocho, Ferrer y Moeller llegan al auxilio de los creativos Pam y Eric, quienes tienen instalado su estudio laboral en su vivienda de estilo gótico. El problema es que la misma se ha tornado el depósito de las múltiples colecciones de objetos de ambos, inundando también su estudio. El resultado es que el trabajo ha comenzado a disminuir y la pareja siente que su carrera está en peligro.

4. Te hace perder mucho tiempo: Si eres una persona desordenada lo sabes. Pierdes tiempo buscando las llaves antes de salir de casa; encontrando el zapato que hace al par debajo de la cama, el sillón, la cocina; o intentando adivinar dónde ha quedado ese documento que necesitas de forma urgente. Si todo se mantiene en su lugar, ganas minutos al ir directamente por lo que necesitas y encontrarlo al instante. Éstos se se vuelven horas si los multiplicas por cada caso dentro de tu cotidianidad. 

5. Puede afectar tu salud: Así es, cuando el desorden lleva a la acumulación desmedida, lo más frecuente es que la casa quede llena de polvo, siendo éste un factor común que desencadena ataques de asma o alergias. 

6. Atenta contra la energía: “Cualquier clase de desorden crea un obstáculo que obstruye el flujo de energía en el espacio”, afirma Karen Kingston en su libro Deshágase del desorden con feng shui. “Esto, a su vez, crea atascos o confusión en los ocupantes del mismo”.

Crédito: ©Katie Brady/Creative Commons

Crédito: ©Charlotte Holmes/Creative Commons

7. Hace que comas peor: “Si tu cocina se ve como si acabara de estallar una bomba, terminarás por salir corriendo a comprar una rebanada de pastel en la cafetería más cercana”, afirmó la doctora Pamela Peeke, corresponsal médico del canal Discovery Health. 

8. Es desencadenante de malestar y estrés: Pamela Peeke señaló también que la falta de organización constante puede causar sentimientos de impotencia, desesperanza, derrota y altos niveles de cortisol (hormona del estrés). “El estrés tóxico te hace envejecer rápidamente, y afecta casi todos los tejidos y órganos de tu cuerpo”, afirmó Peeke.

9. Es capaz de perjudicar tu vida sexual: El dormitorio principal debe conservarse como un refugio para la pareja. Por ello, no debe tener juguetes, computadoras, ni pilas de ropa en el piso o las sillas. “Cuando se elimina el desorden y se restaura la armonía en la alcoba, ¡vuelve la chispa!”, explicó Peter Walsh, experto en orden. 

Qué hacer ante el caos 

Como podrás ver en Clean House Nueva York, lo principal es comenzar a deshacerte de las cosas que no te sirven. Si tienes un niño de cinco años, no tiene sentido que guardes los juguetes que usaba a los dos. Seguramente otros pequeños podrán usarlos en su lugar. 

Los recuerdos que llenan tus repisas pueden irse también. No te unen a las personas con las que los asocias, ¡solo juntan polvo! Los recuerdos están guardados dentro de ti. En todo caso, elige sólo dos y deja ir al resto. 

Otro punto fundamental es limpiar. Suena fácil, pero todos sabemos que muchas veces no lo es. Ten en cuenta que si aseas a diario, esas sesiones maratónicas de puesta a punto del hogar desaparecerán. 

Finalmente, no hagas todo sola. La familia entera debe ponerse de acuerdo para solucionar el problema. Designen juntos los lugares específicos para cada clase de objeto para que puedan encontrarlos fácilmente cuando los necesitan y devolverlos una vez que han terminado de usarlos. Además, pueden dividir las tareas a emprender y cumplirlas sin excepción. 

¿Reconociste tu situación en alguno de los efectos del desorden? Cuéntanos cómo harás para luchar contra él